Caso Odebrecht afectaría a las calificaciones de riesgo en varios países de la región
Brasil y Guatemala sufrieron impactos en su nota
23 de abril de 2019Contenido
El más reciente reporte de la compañía internacional Fitch demostró que los escándalos de corrupción generados por Odebrecht en América Latina han diezmado la confianza institucional. También resaltó que los países donde se cuentan con los mejores sistemas judiciales han presentado un impacto positivo mucho mayor para las calificadoras internacionales, con lo que se ha estimulado la inversión.
La calificadora advirtió que el impacto directo del escándalo de Odebrecht “se ha limitado a Brasil y Guatemala, pero los efectos políticos se han sentido en varios otros países”.
Los indicadores también señalaron que los sectores donde se han producido los golpes más fuertes son gobernabilidad, inversión pública, crecimiento económico y finanzas públicas.
Uno de los ejemplos más claros de los impactos generados por el escándalo de corrupción se vio reflejado en México, Uruguay y Chile. Estos tres países no se vieron inmersos en la red internacional de sobornos que propició la constructora brasileña. En el comunicado sobre la calificación, la empresa dijo que “sus puntuaciones reflejan la fortaleza relativa de sus instituciones, como los controles y balances, incluso en el control de la corrupción”.
Es clave que para el registro de este tipo de calificadoras se generen estrategias contra la corrupción internacional que logren elevar la imagen de los países. Sobre este tema, Chile es uno de los principales referentes a nivel regional, debido a que cuenta con altos estándares en las calificadoras de riesgo (A+), y ha buscado implementar esfuerzos adicionales para combatir la corrupción interna.
Frente a esta situación, la firma concluyó que “la lucha contra la corrupción y la reducción de la misma serán importantes para hacer frente al significativo déficit de infraestructura en la región”.
Este panorama se suma a que la inversión privada y la confianza empresarial han sido golpeadas por los escándalos de corrupción y la agitación política.
Una crítica directa que hace la firma es que en el país las investigaciones del caso Odebrecht no han avanzado mucho; esto complica el panorama internacional, ensuciando la imagen de Colombia.
Ante esta crisis institucional, la calificadora advierte que podrían llegar consecuencias negativas si no se revierten estos escenarios de corrupción.