Confirman condena contra exintendente de Policía por ordenar homicidio de comerciante
Se trató de Cristian Denys Sánchez Arboleda, alias el Cucho, quien fue baleado el 1 de enero de 2014
14 de junio de 2019Contenido
La Sala Penal del Tribunal Superior de Medellín sentenció a 35 años y 10 meses de prisión al exintendente de la Policía Nacional, Mario Andrés Restrepo Posada, alias Don Mario, de 45 años de edad, por los delitos de homicidio agravado y concierto para delinquir con fines de tráfico de estupefacientes agravado.
La investigación está relacionada con la muerte violenta del comerciante de papas Cristian Denys Sánchez Arboleda, alias el Cucho, quien fue baleado el 1 de enero del año 2014 en la plaza de mercado del municipio de Guarne (Antioquia). Minutos después del homicidio las autoridades capturaron en un taxi a Dayron Esteban Ospina Rojas, alias la Chinga o Guassón, quien aceptó su responsabilidad en el hecho y fue condenado a 18 años y 6 meses de prisión.
Luego de varios meses de trabajo articulado entre la Fiscalía General de la Nación y la Sijín de la Policía Nacional, se estableció que el determinador del crimen era Restrepo Posada, máximo cabecilla de una organización criminal llamada Los Cachorros, encargada de la distribución de todo tipo de alcaloides en la mencionada población.
Sánchez Arboleda también sería integrante de Los Cachorros y su muerte se habría ordenado por problemas dentro de la organización.
Los investigadores determinaron además que el procesado tenía nexos con la llamada Oficina, particularmente con el mayor retirado de la policía Óscar Mora Olarte, alias May, quien fue asesinado por sicarios el 10 de septiembre de 2015 en el barrio El Estadio de la capital antioqueña.
Alias Don Mario fue condenado inicialmente a 40 años de prisión por el Juzgado 3 Penal del Circuito Especializado de Antioquia, por los delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir y porte ilegal de armas de fuego de defensa personal. Al resolver el recurso de apelación presentado por la defensa, el Tribunal absolvió al sentenciado por el punible de porte de armas y le fijó una pena de 430 meses de prisión, es decir, 35 años y 10 meses de cárcel.