Conozca la lista de los "sin tocayos" que se han registrado en lo que va de 2025

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En lo que va corrido de 2025, la Registraduría Nacional ha encontrado un fenómeno bastante llamativo frente a los registros de nombres presentes en el país, o los también denominados "sin tocayo", aquellos nombres que nadie más tiene. Aunque la lista es muy amplia, muchos tienen ciertas singularidades, por ejemplo, puede que sean comunes, pero están escritos de una manera "única", o en otros casos, son tan particulares que se hacen irrepetibles.

Según datos recientes de la entidad, en lo que va de 2025 se cuentan con más de 13.000 nombres sencillos con un registro único; entre ellos se destacan Davlieth, Sea, Sol, Dexi, Dan, Lui, Max, Nes, Noa o Rio, que reflejan la creatividad y diversidad que tienen las familias a la hora de elegir como llamaran a sus hijos.

No obstante, hay algunos que aunque le parezca increíble, están en la lista, y puede inferirse que dicho nombre ya no esté de moda, o sea anticuado, por ejemplo, unos de los "sin tocayo" registrados en enero fueron Giovanny, Napoleón, Robin y Carmelo. En otros meses aparecen nombres que no son desconocidos, pero están "en deshúso" como Victor, Luz, Filomena, Miryan o Lidia.

Bajo este contexto se demuestra que cada vez más los padres buscan diferenciar a sus hijos por medio de nombres que sean originales o poco usuales. No obstante, se destaca que pueden ser "sin tocayo" por la ortografía del registro, caso de Kamilo, Talianna, Rober o Jhony.

Esta mezcla, que en la actualidad que se produce entre la tradición y originalidad, demuestra el interesante cambio cultural y generacional que está atravesando el país. De hecho, la Registraduría Nacional, cada mes recibe entre 7.000 y 8.000 registros de nombres en toda Colombia. Además, de este promedio, entre 1.500 y 2.300 corresponden a nombres sencillos y únicos en registro en lo que va del año de 2025.

La cifra da cuenta de una tendencia en ascenso hacia la búsqueda de identidad propia o personalización de los nombres, lo que sería un fenómeno que no solo refleja las modas, sino también las influencias culturales, las redes sociales y las referencias familiares.

Este aumento de nombres únicos y poco repetidos es más que un dato estadístico, ya que refleja la transformación y la diversidad poblacional que hay en Colombia.

No se puede dejar de lado el tema de los nombres compuestos, y pasa parecido que con los sencillos, algunos pueden sonar anticuados, como el caso de Marco Aurelio, Mónica de la Cruz, o algunos son curiosos como Don José, Yeny Tatiana o Hugleiner Enrrique, pero algunos son prácticamente indecibles como es el caso de Seyhukwn Dwawiku.