“El mundo clama, está preocupado porque la tiranía y la arbitrariedad siguen creciendo"
Viviane Reding, vicepresidenta de WLF, anotó que la independencia judicial y el Estado de Derecho son una precondición de la democracia
03 de diciembre de 2021Contenido
Ayer, con la presencia de aproximadamente 3.000 asistentes, entre presenciales y virtuales, 250 panelistas de 60 países y medio centenar de paneles temáticos, se inauguró en el Centro de Convenciones Puerta de Oro, en Barranquilla, el World Law Congress, bajo la organización de la World Jurist Association.
Las palabras introductorias corrieron por cuenta del presidente de esta última, Javier Cremades, quien resaltó que los esfuerzos de reunir, en medio de la pandemia, a los más distinguidos exponentes del mundo del derecho buscan contribuir a la defensa de la libertad y la dignidad de cada persona.
En esa línea, dijo que “el mundo clama, está preocupado porque la tiranía y la arbitrariedad siguen creciendo y ocupando espacios de poder”, por lo que espacios como el Congreso son fundamentales para promover el Estado de Derecho como garantía de paz.
Por su parte, el ministro de Justicia de Colombia, Wilson Ruiz Orejuela, recalcó que “es necesario involucrar a los diferentes actores de la sociedad y de la comunidad jurídica internacional, en el fortalecimiento y la profundización de la justicia en el mundo”. Por eso, resaltó que es importante que las temáticas discutidas se conviertan en la materia prima de la formulación de políticas públicas en el mundo.
Por su parte, el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, agradeció la designación de la ciudad como sede del Congreso, e hizo énfasis en que Colombia no puede dar por sentada la fortaleza de nuestras instituciones.
“Acá las contradicciones políticas son aireadas y radicales pero son libres, y eso no lo vemos en nuestro vecino país y en otras regiones. Necesitamos que este debate se dé, no solo para ayudar a impulsar cambios fundamentales, sino para que se promueva la democracia entre las nuevas generaciones”, concluyó.
A su turno, la procuradora general de la Nación, Margarita Cabello Blanco, resaltó el rol del Ministerio Público en el Estado Social de Derecho, y anotó que entre su papel está “atender factores que quieren, pero no van a poder, instaurar el caos y el populismo”, a través de desinformación en redes sociales, economías ilícitas y corrupción, entre otros. Además, anotó que la pandemia obligó a tomar medidas que tuvieron consecuencias en el Estado de Derecho, pero reiteró que “el derecho estuvo a la altura”.
El fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, enfatizó que sin justicia no hay democracia, por lo que invitó a reflexionar sobre los tiempos para lograr sentencias condenatorias y los mecanismos de terminación anticipada de procesos como mecanismo para desmantelar estructuras criminales, al tiempo que recalcó que la entidad que lidera es ajena a los procesos electorales e independiente de las presiones mediáticas.
A su turno, Viviane Reding, vicepresidenta de WLF, anotó que la independencia judicial y el Estado de Derecho son una precondición de la democracia, y que estos no se pueden dar por sentados.
“Ni las constituciones bien escritas ni las leyes definidas pueden parar populismos y autoritarismos. Para evitar el desmantelamiento del Estado de Derecho, donde parece sólido, se requiere trabajar en conjunto y en todos los niveles”.
En tanto Dairo Mora, presidente de Civilec, invitó a la construcción de políticas públicas enfocadas en el medio ambiente y la protección de la empresa y la propiedad intelectual, mientras Cheol-Kyu Hwang, presidente de la Asociación Internacional de Fiscales Generales, reiteró el valor de la independencia judicial.
En la inauguración, José Igreja Matos, presidente de la Unión Internacional de Magistrados, también mostró preocupación por el deterioro de la democracia como consecuencia del covid, y dijo que “el ADN de los jueces en todo el mundo, para cumplir su deber con los ciudadanos, es el ejercicio sin coerciones de sus funciones”.
En la misma línea Manuel Aragón, director académico del WLC, reiteró que “el Estado de Derecho es un actor inevitable para el desarrollo de las naciones, pues sin él no es posible el desarrollo social”, y dijo que este solo es posible en un régimen democrático.
Finalmente Tedros Adhanom, director de la OMS, resaltó la importancia de avanzar en la ampliación del marco jurídico, mediante nuevas herramientas, para responder a emergencias sanitarias, y mencionó la suspensión de las patentes de las vacunas como posible salida a la inequidad en su distribución.