En octubre se sabe si levantan o no suspensión de Aquarela
Próximo martes 9 de octubre será la nueva audiencia.
20 de septiembre de 2018Contenido
Después de ocho audiencias policivas que se desarrollaron entre octubre del año pasado hasta lo corrido del 2018, la última palabra sobre si se levanta o no una de las suspensiones que tiene el proyecto de viviendas de interés familiar (VIS) Aquarela es la Inspección de Policía.
Será el próximo 9 de octubre que se conozca esta determinación. La suspensión de obras en este proyecto, que en ese entonces avanzaba con el levantamiento de una primera torre, se dio tras una diligencia hecha por la inspección el 24 de octubre de 2017 al notar que los constructores no instalaron una polisombra, entre otros requisitos urbanísticos que, según la Promotora Calle 47, dueños del proyecto, fueron subsanados en el acto.
Sin embargo, aunque se levante la suspensión por parte de la Inspección de Policía, hay otras vigentes por órdenes judiciales, las cuales continúan en proceso ante un juez con funciones de control de garantías.
Revisaron estudio
Aunque por primera vez la audiencia policiva fue a puertas cerradas para los medios de comunicación, se conoció que en la diligencia participaron la Inspectora delegada para el caso, representantes de la Procuraduría, del Ministerio de Cultura, la Alcaldía y los abogados de Aquarela.
En esta se realizó un análisis de un estudio técnico elaborado por la Secretaría de Planeación de Cartagena, el informe topográfico elaborado por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) y el dictamen de valoración patrimonial.
Luego de llevar a cabo los alegatos respectivos y las exposiciones de las partes, la inspectora citó a nueva audiencia para el martes 9 de octubre, para anunciar su decisión tras escuchar todas las partes y conocer todos los soportes desde la perspectiva de diferentes entidades sobre Aquarela.
Pese a que los estudios entregados por Planeación se han manejado bajo completo hermetismo, se conocieron apartes de este. Según esta dependencia la conclusión principal del informe es muy clara: los constructores invadieron el espacio público.
Planeación precisó que en la parte del edificio que colinda con la calle 35, los constructores levantaron el primer piso de 13,60 metros cuadrados por fuera del parámetro aprobado; mientras que del piso segundo al 25 se encontraron 224 metros cuadrados adicionales que no estaban en los planos aprobados.
Por su parte, en la zona del edificio que da hacia la carrera 17, en el informe se detectaron 18,59 metros cuadrados de más en el primer piso y 363,60 metros cuadrados del segundo piso al 25.
“Existe un área de 619,59 metros cuadrados por fuera de los parámetros aprobados en la licencia de construcción, utilizando indebidamente espacio público. Se observa que la construcción no se ajusta con los planos aprobados que respaldan las resoluciones (N. 595 del 28 de diciembre de 2015 y N. 0470 del 12 de septiembre de 2016), ya que la edificación existente tiene un retiro de 4.150 metros hacia la izquierda entrando y 4.148 metros hacia la derecha entrando”, dice el informe.