“El tema migratorio en los últimos años ha tenido una tendencia restrictiva y controlada"

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Hace aproximadamente 10 años nació Tannus & Asociados, una firma boutique que tenía la intención de ser referente en el mercado legal en las áreas de práctica laboral y migratoria. La iniciativa se gestó durante una transición laboral de Rodrigo Tannus, socio fundador de la firma, quien tenía la idea de construir un proyecto a largo plazo con estándares altos en calidad y de talla internacional.

Tannus habló sobre el décimo aniversario de la firma, la visión para la próxima década y de cómo abordan los asuntos corporativos desde la perspectiva migratoria.

¿Cómo han sido los primeros 10 años de la firma? ¿En qué cambiaron frente a la idea inicial que tenían?

Nosotros empezamos en 2015, en medio de una transición laboral mía, que me llevó a repensar y mirar qué nuevas cosas se podían hacer. En ese momento decidí empezar a construir una firma boutique ultra especializada en temas laborales y migratorios: un proyecto a largo plazo con unos estándares bastante altos en temas de calidad.

Yo creo que eso se ha mantenido en el tiempo. Hoy, 10 años después, somos una firma consolidada y reconocida por el rigor y la cercanía que tenemos con los clientes.

Ya somos un equipo de 10 profesionales, con tres socios, y la idea es seguir creciendo con esa visión clara de ser referentes en nuestras áreas de práctica, sin perder el enfoque humano, que yo creo que nos ha caracterizado hasta hoy.

Quiero preguntarle sobre ese relacionamiento con las nuevas generaciones de abogados, ¿qué ha encontrado en estos 10 años?

Yo creo que hay que apostar por el talento joven. Eso ha sido pilar fundamental también de la organización, en donde creemos que esas personas que están recién graduadas o que eventualmente tienen un perfil sin mucha experiencia laboral, hay que contratarlas para darles una oportunidad, y eso lo que nos ha aportado bastante es visión fresca.

Es muy importante tener un balance entre lo que se espera como empresa de ellos, pero también de lo que ellos esperan de la firma. Las nuevas generaciones quieren tener una flexibilidad en donde, eventualmente, puedan trabajar desde la casa o desde otro lugar, no necesariamente en la oficina, con una relación de calidad de vida personal y laboral, que es muy importante.

Ustedes son una firma especializada en la práctica migratoria, ¿cuáles son las principales consultas en un contexto de altas tensiones geopolíticas?

Nosotros tenemos un enfoque de migración corporativa. Lo que hacemos es llevar casos de personas que quieren venir a Colombia a trabajar, a constituir empresas, realizar negocios, inversiones, etcétera; o personas colombianas, o incluso extranjeros, que están acá en el país y quieren hacer las mismas actividades en el exterior.

Nos dedicamos a esos asuntos corporativos desde la perspectiva migratoria, por lo que también revisamos temas laborales, que también están bastante activos por todo lo de la reforma.

El tema migratorio en los últimos años se ha caracterizado por tener en una tendencia restrictiva, en el sentido de mayores controles. En Estados Unidos es donde cada vez hay más requisitos para obtener las visas, hay más restricciones de ingresos o, incluso, las personas que ya están de manera regular o incluso irregular, tienen unos controles mucho más rigurosos, por los que han ocurrido deportaciones masivas en en este país.

Usted hablaba también de la Reforma Laboral ¿Qué tantas inquietudes le surgieron a los clientes corporativos frente a un cambio tan importante que comenzó en junio?

El texto definitivo genera diferentes cambios y, como es normal para todas las partes, surgen diferentes inquietudes, empezando por desde cuándo van a ser exigibles todas esas modificaciones que se están planteando en la nueva normatividad, porque no todas entraron en rigor a partir de julio de este año.

Hay mucho debate alrededor de todo lo que tiene que ver con los aprendices, las modificaciones que se surtieron frente al tipo de contrato, los costos que eso va a generar y las implicaciones en términos de eventuales fueros.

¿Cómo se visualizan en los próximos 10 años de la firma? ¿Cuáles son los retos?

No estamos cerrados a tener algún tipo de integración. Yo creo que esas cosas siempre vale la pena tenerlas sobre la mesa y revisarlas y, de acuerdo a lo que vaya surgiendo, mirar si efectivamente eso puede llegar a convenir o no.

Yo creo que, de cara al futuro, toca seguir muy actualizados porque la velocidad a la cual van los cambios es cada vez mucho mayor. Debemos apoyarnos en tecnología de punta.