“Es el momento de hallar en la digitalización el futuro para el mercado musical”
Las regalías digitales surgen como una alternativa viable para los artistas del país en medio de la contingencia del covid-19
01 de mayo de 2020Contenido
Una de las medidas para mitigar el contagio del covid-19 en Colombia fue la suspensión de conciertos y eventos en los que se aglomeren las personas, lo que ha generado un impacto no solo en los consumidores de este tipo de eventos, sino también en el gremio musical.
Por ello, Daniel Correa y Sebastián Montaño, dos de los cuatro abogados que conforman Destra Entertainment Lawyers, hablaron sobre las alternativas que tienen los artistas para seguir generando ingresos durante este tiempo de crisis.
¿Qué pueden hacer los artistas para acceder a regalías digitales?
La principal opción se sitúa en la comercialización digital de su música. Existen variadas alternativas y la más importante de ellas es su distribución en las más de 200 plataformas de streaming que hay actualmente en el mercado.
El primer paso para acceder a este rico ecosistema de servicios digitales consiste en la contratación de una empresa de agregación digital, una vez distribuida la música en las plataformas, el artista puede reclamar sus regalías a dicha agregadora.
¿Cómo está Colombia respecto a otros países en cuanto al aprovechamiento de este tipo de plataformas?
Es entendible que países y mercados como el americano y el europeo nos lleven tanta ventaja pues la industria musical surgió en aquellos territorios. Sin embargo, no hacemos absolutamente nada para mejorar, nuestra industria sigue regulada por leyes anticuadas del siglo XX (Decisión Andina 351 de 1993 y Ley 23 de 1982) donde poco o nada se valora o se entiende el mercado digital.
La distribución digital o las regalías digitales no son conceptos que nuestras legislaciones manejen, teniendo que acudir constantemente a la costumbre de la industria musical en Estados Unidos. Si bien ha habido iniciativas privadas y distribuidoras creadas en América Latina, no hay ningún avance en temas legales o en protecciones de artistas.
¿De qué forma esta crisis puede ayudar a reducir la informalidad?
Esta situación permitió a los artistas tener alternativas a su forma clásica de obtener ingresos de la música, principalmente de los shows y eventos en vivo. Creó la necesidad de utilizar medios virtuales y que muchos replantearan su proyecto musical y se formalizaran para distribuir adecuadamente su música en plataformas digitales.
Las crisis pueden ser vistas como una oportunidad cuando se les observa de forma inteligente. El hecho de que los artistas tengan en regla las autorizaciones por derechos de autor a la hora de distribuir digitalmente su música permite que la informalidad se reduzca; a medida que la digitalización permee la industria de la música, más lo hará la formalidad y las negociaciones.
¿Cuál es la importancia de que los artistas dejen de ser informales?
Cuando los artistas son informales, por regla general, no tienen claros los derechos y formas de negociación que posibilitarán su permanencia en el tiempo dentro de la industria musical y sus finanzas. En Destra nos gusta precisar que ser un empresario musical, y no un solo un artista, minimiza el riesgo y maximiza los resultados. El 90% de los artistas no entiende acerca de regalías, costos fijos, proyecciones, ingresos, adelantos, entre otros.
¿Qué se recomienda para seguir adelante con los proyectos musicales durante esta crisis?
Es fundamental que los artistas organicen sus catálogos en plataformas, aprovechen para afiliarse a una sociedad de gestión colectiva (preferentemente en Estados Unidos dependiendo del proyecto), organicen sus porcentajes de regalías y vean esta problemática como un momento para poner la casa en orden y cultivar una fan base sólida.
¿ Cuál es el panorama?
Facebook reveló nuevas herramientas y la idea de monetizar la entrada de personas a los lives y los Igtv de Instagram; por tanto, en poco tiempo, se podrá empezar a pautar los “en vivo” que se realicen y se formará un nuevo ingreso para la industria. Igualmente, cada vez surgirán más plataformas de e-concerts donde los artistas pasarán todo su booking al mundo digital.
Es momento de replantear la música, de hallar en la digitalización el futuro del mercado musical y para eso se debe chequear una serie de casillas que le permitirá a un proceso ser rentable y ser viable a futuro.
No podemos depender del mundo análogo y de los conciertos tradicionales, todo proyecto ideal debe encontrar su estabilidad económica en las regalías digitales de plataformas y en la comunicación pública de su música, solo así saldremos adelante de esta crisis.