Fiscalía archivó investigación contra Iris Marín por denuncia de calumnia de Benedetti
El ministro interpuso el recurso por las declaraciones que la defensora del Pueblo hizo sobre las acusaciones de violencia intrafamiliar en su contra
28 de noviembre de 2025Contenido
La Fiscalía General de la Nación ordenó archivar un proceso que se adelantaba contra la defensora del Pueblo, Iris Marín, a causa de una denuncia que el ministro del Interior, Armando Benedetti, interpuso en su contra por declaraciones que profirió entre noviembre de 2024 y febrero de 2025 y que afectaron su integridad y buen nombre.
Con fundamento en el análisis, el ente ordenó "el archivo de la investigación adelantada contra Iris Marín Ortiz, por hechos relacionados con el ejercicio del cargo como defensora del Pueblo, por atipicidad de la conducta de calumnia en contra de Armando Benedetti", se lee en el documento.
En el recurso, Benedetti argumentó que Marín profirió "ataques indiscriminados sin respaldo probatorio" en el marco de su pronunciamiento sobre las acusaciones contra el ministro de presunta violencia intrafamiliar.
No obstante, el ente investigador encontró que no es posible considerar las declaraciones hechas por la defensora como una forma de arremeter directamente contra Benedetti y, por tanto, no es una conducta punible. "Esa manifestación no puede ser apreciada como una afrenta contra la integridad moral del querellante, pues las personalidades públicas se someten al escrutinio de los ciudadanos por el rol social que cumplen", indicó.
La Fiscalía también explicó que lo dicho por Marín tampoco correspondió con una acusación, pues la información sobre las presuntas conductas de violencia de Benedetti fueron publicadas inicialmente en medios de comunicación y sus declaraciones fueron una referencia generalizada esa información y en relación con las investigaciones penales que él enfrentaba, "por lo que la conducta de la querellada resulta objetivamente atípica frente al delito de calumnia".
El ente investigador recalcó que todos los funcionarios están expuestos al escrutinio público de la ciudadanía, la cual actúa como un mecanismo de control, debido a la exposición de sus cargos, el poder que estos les otorgan y la importancia social de sus funciones.