Judicial

La Cancillería asumirá el riesgo financiero y operativo para expedición de pasaportes

Este proyecto de cooperación tiene como objetivo proporcionar a la Imprenta Nacional las competencias, los medios técnicos, la tecnología y los conocimientos

12 de julio de 2025

Juan Diego Murcia

jmurcia@larepublica.com.co
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Luego del rifirrafe entre diferentes autoridades del Gobierno Nacional, que terminó con la salida de Laura Sarabia como canciller, Portugal avaló formalmente el memorando de entendimiento suscrito con Colombia para desarrollar el nuevo modelo de expedición de pasaportes.

Pese a que la Cancillería respondió un derecho de petición a la senadora Angélica Lozano en el que confirmó que la planta de producción nacional no está habilitada y no se han constituido las vigencias futuras para garantizar el presupuesto hasta 2030, el país europeo implementará el memorando de entendimiento, para la participación de la Imprenta Nacional - Casa da Moeda, en el proceso de producción y personalización de pasaportes y otros documentos oficiales.

Según el Consejo de Ministros de Portugal, este proyecto de cooperación tiene como objetivo proporcionar a la Imprenta Nacional de Colombia las competencias, los medios técnicos, la tecnología y los conocimientos que le permitan asumir la producción y la personalización de estos documentos oficiales a partir de 2035.

LOS CONTRASTES

  • Alfredo Saade Jefe de despacho

    “Estamos listos para firmar con Portugal. Luego de reuniones técnicas todo está acordado. Nosotros le podemos garantizar al país que la Imprenta Nacional está lista para asumir esa función”.

  • Gregorio Eljach Procurador General

    “Es un tema que nos tiene preocupados, no es posible que lleguemos a una situación en la que los colombianos no puedan movilizarse por el mundo entero. Hay informaciones que no coinciden unas con otras”.

El Gobierno finalmente no prorrogó el contrato para expedir pasaportes con Thomas Greg & Sons y lo dejó en manos de la Casa da Moeda de Portugal, una institución que tiene sus raíces en el siglo XIII, cuando se institucionalizó la producción de moneda como una función asociada al poder central.

Gráfico LR

Paralelamente, la Imprensa Nacional del país luso había sido creada en el siglo XVIII con el objetivo de imprimir documentos fundamentales del Estado, como leyes, decretos, tratados y libros oficiales.

Pero en 1972 se marcó un punto de inflexión con la fusión de la Casa da Moeda y la Imprensa Nacional. Esta unión respondió a la necesidad de racionalizar recursos, modernizar procesos y centralizar funciones estratégicas bajo una sola entidad pública. Esa fusión dio nacimiento a la Imprensa Nacional - Casa da Moeda, Incm, una empresa del Estado portugués que unificó la producción de moneda, documentos de seguridad y publicaciones oficiales.

Colombia busca aprender del modelo que Portugal lleva más de 50 años siguiendo, todo a través de la Imprenta Nacional.

Portugal explicó que, con el fin de reducir la exposición de la Imprenta Nacional de Colombia a los riesgos cambiario, operativo, de inversión y geográfico identificados por Parpública, dada la importancia estratégica del proyecto para la política exterior portuguesa, se llevó a cabo y se negoció una reconfiguración del proyecto, con especial atención a tres dimensiones.

La primera de ellas es la reducción del alcance, con la transferencia de responsabilidades financieras y operativas al Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, a través del Fondo Rotatorio de Relaciones Exteriores y a la INC.

La segunda es la corresponsabilidad de la Imprimerie Nationale que, en comparación con la primera versión de la propuesta de la Imprenta Nacional de Colombia, pasó de subcontratista a miembro del consorcio, en un modelo de consorcio interno, asumiendo las dos entidades, de Portugal y Francia, el reparto íntegro, en proporciones iguales, de los costes, inversiones y riesgos del contrato y de la ejecución del proyecto.

La tercera dimensión está relacionada a la introducción de cláusulas contractuales que garanticen la cobertura de los riesgos cambiarios y financieros, minimizando los demás riesgos contractuales. Estas aún no han sido publicadas por el Gobierno.

El excanciller Luis Gilberto Murillo aseguró en su momento que sí había otra alternativa al prorrogar el contrato con Thomas Greg & Sons y que su administración había dejado “completamente estructurada” el inicio del nuevo modelo de pasaportes. Cabe recordar que, aunque se firme el memorando de entendimiento, la Cancillería dijo que se requieren 35 semanas para que arranque el nuevo modelo.

El contrato que se prorrogó con Thomas Greg & Sons va hasta el 31 de agosto, por lo que los tiempos están apretados. El jefe de despacho, Alfredo Saade, dijo que estos documentos estaban asegurados para seis meses.