Ley Sefardí de nacionalidad española, el nuevo negocio en cooperación internacional
El plazo para solicitar este beneficio migratorio vence el primero de octubre de este año
20 de mayo de 2019Contenido
Según la Embajada Española, en el país se han generado 5.000 solicitudes de colombianos descendientes de judíos sefardíes que quieren la doble nacionalidad. Este es un universo importante, considerando que, según el Instituto Nacional de Estadística de España (INE), el flujo migratorio de colombianos en 2017 fue de 37.343.
Estas solicitudes se han realizado bajo el amparo de la Ley 12 de 2015; una normativa española aprobada durante el Gobierno de Mariano Rajoy en la que se busca la reparación histórica de las comunidades judías expulsadas de España.
Según la Ley, los interesados tendrán plazo de presentar su solicitud ante las autoridades españolas hasta el 1 de octubre de 2019. Para ello tendrán que demostrar su descendencia sefardita y un arraigo especial con España.
Este es un procedimiento notarial y se encuentra vigilado por la Dirección de Asuntos Notariales del Estado Español.
El abogado laboralista y socio de ALL Abogados, Felipe Álvarez, explicó que “muchos colombianos han encontrado en esta Ley una salida muy interesante para lograr la doble nacionalidad; es una oportunidad distinta en su proyecto de vida”.
Aunque el proceso se realiza ante las autoridades españolas, algunas firmas de abogados han encontrado una oportunidad de negocio realizando alianzas con firmas españolas que les permitan agilizar este trámite migratorio.
Como testimonio de esto, Enrique Álvarez de Lloreda Camacho & Co dijo que “hay firmas que han encontrado una salida en este tema. Vimos que muchos colombianos se han interesado por esta opción, que pertenece a la esfera íntima de la persona y a su historia familiar”.
¿Cómo se prueba la descendencia sefardita?
Según la Ley española, existen seis posibilidades para demostrar la pertenencia a este grupo étnico, que pueden utilizar los interesados en el proceso de nacionalización.
La primera herramienta definida por la Ley es tener un certificado de la Federación de Comunidades Judías de España (Fcje). Una opción que recomienda la Embajada Española para realizar el trámite. Este certificado tiene un costo cercano a US$70, pero es una de las pruebas más efectivas para tener éxito en el proceso de nacionalización.
La segunda posibilidad es tener un certificado del presidente de la comunidad judía de la zona de residencia o ciudad natal del interesado.
El tercer documento válido para probar esto es contar con un certificado de la autoridad rabínica del país de residencia.
La cuarta prueba de descendencia es una partida de nacimiento o la “ketubah” o certificado matrimonial, con el que se de fe de su celebración según las tradiciones de Castilla.
La última opción que recomiendan las autoridades españolas es la relación de los apellidos con la comunidad. Según la embajada, para ello deberá presentarse “informe de una entidad de competencia suficiente, que acredite la pertenencia de los apellidos del solicitante al linaje sefardí de origen español”.
En Colombia, puede consultar si su apellido es de origen sefardí con la Academia Colombiana de Genealogía o con otras entidades expertas en la materia que busquen la relación con la comunidad.
Es importante aclarar que no se necesita ser judío militante, sino que puede ser solicitado por cualquier persona que cuente con estas condiciones.
Después de que se pruebe la descendencia étnica, los solicitantes también deberán demostrar un interés o un arraigo con la patria española.
Para ello, las autoridades solicitan que la persona realice un examen de conocimientos sobre la historia y las leyes españolas. Otras pruebas sobre el arraigo español son certificados de historia y cultura españolas expedidos por instituciones con reconocimiento oficial, o demostrar que se han participado con actividades benéficas o culturales que busquen propagar la hispanidad en el mundo.
Dentro del sondeo realizado, el costo de este trámite oscila entre $1,5 millones y $5 millones, y puede llegar a tener una duración de un año.
Antecedentes
Hay otra estadística que también se viene moviendo en los últimos años y es la llegada de migrantes españoles que solicitan la nacionalidad colombiana. Según cifras del Ministerio de Relaciones Exteriores, en los últimos dos años se ha registrado un repunte del 50% en la cantidad de solicitantes. Según la Ley 71 de 1971 se convalidó en Colombia el Convenio de Nacionalidad entre Colombia y España, con el que se estipularon una serie de caminos de flexibilidad para que los ciudadanos de estos dos países puedan adquirir la doble nacionalidad sin tener que renunciar a la de origen.