Niegan participación a Salvatore Mancuso de asistir a la entrega de tierras en Córdoba
La Unidad para las Víctimas lo invitó en el marco de su gestoría de paz, la magistrada del sistema de Justicia y Paz negó la asistencia
02 de octubre de 2024Contenido
Este jueves tres de octubre, el gobierno nacional llevará a cabo una de las entregas de tierras más significativas en la historia de Colombia, en el contexto de la Reforma Rural Integral. Se adjudicarán alrededor de 9.000 hectáreas en Córdoba y Magdalena a campesinos y víctimas del conflicto armado, tierras que anteriormente pertenecieron a exjefes paramilitares como alias Macaco, Cuco Vanoy y Nico.
Salvatore Mancuso, excomandante de las Autodefensas Unidas de Colombia, fue invitado por la Unidad para las Víctimas, pero su participación fue negada por la justicia. Desde su liberación el 10 de agosto, Mancuso enfrenta restricciones que le impiden visitar varios departamentos, incluyendo Córdoba y Magdalena, con el fin de proteger los derechos de las víctimas del paramilitarismo.
Lilia Solano, directora de la Unidad para las Víctimas, solicitó a la magistrada Luz Marina Zamora el permiso para que Mancuso asistiera al evento, argumentando que su presencia representaría un gesto simbólico importante para los beneficiarios. Sin embargo, la solicitud fue rechazada por razones de seguridad.
A pesar de esta negativa, Mancuso asistirá el cuatro de octubre a un encuentro nacional de sujetos de reparación colectiva en Corferias, Bogotá, donde se espera la participación de más de 1.000 representantes de diversas colectividades que exigen justicia.
La entrega de tierras en Córdoba y Magdalena forma parte de un plan más amplio, con un compromiso de llegar a las 50.000 hectáreas durante octubre, según el director de la Agencia Nacional de Tierras , ANT, Felipe Harman. Esta estrategia incluye la venta de terrenos por parte de la Unidad para las Víctimas a la ANT, muchos de los cuales fueron incautados en procesos de Justicia y Paz.
La ANT subraya la importancia histórica de estas tierras, que pertenecieron a quienes perpetraron algunas de las masacres más trágicas del país, como las de Mapiripán, El Aro, El Salado y Gabarra. La primera entrega de este jueves se valoriza en más de $108.000 millones, destacando la relevancia de la reparación integral para las víctimas y el avance hacia una verdadera reforma agraria en Colombia.