Adición energética
05 de noviembre de 2025Contenido
Las tendencias permean todos los aspectos de la vida cotidiana. Los temas energéticos no escapan a ello. La realidad es que por razón de la imposibilidad de obtener los resultados esperados a 2030, respecto de la transición energética, con la visión de lograr la sustitución de los combustibles fósiles por energías renovables, ahora estamos en la tendencia de la adición energética. Los que siguen convencidos que hoy es posible, la sustitución como mecanismo de transición, están en la penúltima moda, es decir, están desactualizados.
La adición energética nos dice que se requiere una combinación de energías y ello implica mantener y aprovechar las energías fósiles para asegurar un suministro energético estable.
La razón es simple: la demanda de energía no decrece, por el contrario, aumenta de manera significativa. Ello se explica, entre otros temas, por el crecimiento de la sistematización. La inteligencia artificial y los centros de datos, son grandes consumidores de electricidad. La inteligencia artificial generativa, sus modelos de aprendizaje y sus redes neuronales, requieren de potentes unidades de procesamiento gráfico (GPU). Desde lo más sencillo como los chabots que se han vuelto tan comunes, y producen millones de interacciones diarias, hasta modelos más complejos que usan la industria y el comercio. Leyendo información para escribir este texto, encontré que ChatGPT, genera una huella de carbono similar a la de 125 vuelos de ida y vuelta entre New York y Pekín. Eso es importante en materia de consumo de recursos, incluyendo electricidad.
Es cierto que puede haber mejoras tecnológicas que ayuden, a futuro, en la sostenibilidad tecnológica, pero tomará tiempo lograrlo y que se masifique. Para países como el nuestro, donde las redes eléctricas todavía tienen tantas pérdidas, eso llegará aún más tarde.
El Instituto de Energía y Ambiente de PennState, dice que en 2023 los centros de datos necesitaron del 4,4% de la electricidad de EE.UU. y que la cifra se podría triplicar para 2028. También señala que los centros de datos podrían representar el 20% del consumo de electricidad a nivel mundial, entre 2030 y 2035. Dado que el crecimiento de las energías renovables no se da al mismo ritmo, la adición energética es y será necesaria.
En el caso de Colombia, la oferta de energías renovables en el país alcanzó el 13.87% de la matriz energética para 2025. A su vez en 2024 Colombia fue el país con mayor crecimiento en aprendizaje de IA generativa, y se dice que requerimos de más profesionales conocedores del tema, para atender la demanda del sector productivo. La prensa publicó los resultados de un estudio de GAD3 y Planeta Formación y Universidades, que indica que el 95% de los empresarios y empleados colombianos, conoce al menos una herramienta de IA. El 83% de los directivos nuestros usa IA en la vida personal y 74% en el ámbito laboral. En el caso de los trabajadores, el 74% de lo hace en la vida personal y el 69% en el ámbito laboral. En cuanto a las instituciones educativas, ya el 79% de ellas usa IA, en gestión académica, formación y evaluación. Entonces, hablar de sustitución de energías fósiles por energías renovables hoy, no es posible. Necesitamos la IA en los servicios financieros, en la salud, en el entretenimiento, las telecomunicaciones y lo más relevante, en la industria.
Entonces hay que reconocer, que los combustibles fósiles se necesitan y que permanecerán en la matriz energética colombiana por largo tiempo. Cuando la oferta de energías renovables logre satisfacer la demanda, el mercado mismo se encargará de dejar de usar las fuentes fósiles. No es conveniente, ni posible, dejar de hacerlo ahora y menos por orden de un decreto.