Opinión

Los retos del Apec

10 de agosto de 2013
Canal de noticias de Asuntos Legales

Contenido

Colombia sigue en su aventura de volcarse hacia los mercados más jugosos del mundo. Su afán de diversificar sus acuerdos comerciales y fortalecer su economía ahora lo tienen con la vista puesta en la Alianza del Pacífico, un mercado de más de 2.500 millones de habitantes a los que podría llegar y para el que tendrá que prepararse si de verdad quiere ingresar a las grandes ligas del comercio mundial.

El mencionado acuerdo proyectaría al país en nuevos y numerosos mercados, que hoy se vislumbran como el mejor escenario para nuestros exportadores una vez se afiancen los acuerdos para entrar a hacer parte del grupo de países que como Chile, México y Perú ya nos llevan un buen trecho en esos mercados.

Si bien Colombia ha venido abriendo puertas con otros mercados como el de la Unión Europea, y desde el punto ideológico y geoestratégico, resulta conveniente preparar el terreno en Asia Pacífico, donde los grandes compradores se interesan en las exportaciones de petróleo, carbón y en menor escala los productos agrícolas, todavía desconocemos si estamos preparados para hacerle frente a los desafíos que ofrecen las economías de países como Malasia, Australia, China y Rusia por nombrar apenas unos pocos.

Para ninguna economía es despreciable el poder hacer parte del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC) y menos si tomamos en cuenta que los 21 países que la conforman mueven el 46 % del comercio global, lo que hace entendible la importancia de la aprobación del Acuerdo Marco y la firma del mismo hace unas semanas en la ciudad de Calí, entre Colombia, México, Chile y Perú, para poder actuar como bloque en temas de inversión, comercio y favorecer plenamente la libertad para la circulación de personas y el flujo de productos con esas naciones.

Sin embargo en el caso de Colombia, vamos a tener que mirar como nuestros productores van a alcanzar la competitividad, pues la agenda interna que en su momento se buscó para hacerle frente al TLC con los Estados Unidos prácticamente se quedó a medio camino y los problemas logísticos y de infraestructura siguen siendo una de nuestras mayores debilidades.

Si bien el país debe avanzar en su agenda comercial para ser más competitivos frente a nuestros competidores, debemos avanzar en temas como la innovación en ciencia y tecnología y seguir fortaleciendo la infraestructura y sobre todo, no seguir creyendo que para competir, solo lo podemos hacer con productos terminados, cuando ya el comercio mundial conoce de lleno que por lo menos entre un 30% y un 40 % de los productos manufacturados en el mundo tienen un contenido internacional.