La inevitable adopción de estándares internacionales ESG
03 de octubre de 2024Contenido
La sostenibilidad se ha convertido en un eje central de las decisiones económicas y comerciales a nivel internacional, impulsada por la presión de inversionistas, consumidores y reguladores. Recientemente, Colombia ha avanzado en la integración de factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG por sus siglas en inglés). Sin embargo, aún enfrenta desafíos para alcanzar los estándares internacionales establecidos en mercados clave como la Unión Europea (U.E.).
Uno de los avances más significativos en la U.E. es la Directiva de Reporte de Sostenibilidad Corporativa (CSRD) que exige a las grandes empresas europeas y a las no europeas con actividades en la U.E. reportar sobre el impacto y gestión ambiental, social y de gobernanza de sus actividades. La CSRD exige la presentación de dicha información bajo el marco de informes de los Estándares Europeos de Informes de Sostenibilidad (ESRS) adoptados por la UE. A su vez, los ESRS incorporan las leyes e iniciativas europeas e internacionales vigentes relacionadas con los informes de sostenibilidad, con lo cual buscan evitar la duplicidad de los esfuerzos de las empresas en sus divulgaciones y reportes al permitir la interacción con los diversos estándares, como ISSB, TCFD y GRI.
Colombia también está avanzando hacia la integración de los factores ESG en sus marcos regulatorios. Mediante la Circular Externa 031 de 2021, la Superintendencia Financiera de Colombia estableció directrices a las instituciones financieras para la revelación de información sobre asuntos sociales y ambientales, incluyendo los vinculados con el cambio climático. La circular está enfocada en la transparencia, la estandarización y la gestión efectiva de riesgos y oportunidades.
Por su parte, la Superintendencia de Sociedades, mediante la Circular Externa 100-000010 de 2023, a través de recomendaciones, inicia un proceso pedagógico a algunas de las entidades sujetas a su vigilancia y control, con el fin de que éstas adopten mejores prácticas empresariales en materia de sostenibilidad. Conforme a lo anterior, se empieza a establecer un marco que permite identificar y abordar los riesgos de sostenibilidad y los desafíos sobrevinientes que deberán ser abordados con soluciones innovadoras y sostenibles.
A medida que los mercados globales evolucionan, el sector financiero colombiano ha tenido que adoptar las medidas para el control, mitigación, reporte y divulgación de sus actividades en el ámbito ESG, así como en la adopción de los estándares ESG internacionales con el fin de consolidar su participación en el mercado local e internacional.
Ahora bien, el reto se incrementa para las empresas que desean: (i) operar en la U.E., (ii) atraer inversión extranjera y (iii) mantenerse competitivas, puesto que deben gestionar e integrar los impactos y riesgos ESG en la estrategia general de la empresa, lo que puede implicar cambios significativos en la gobernanza y la toma de decisiones. De esa manera, las empresas que logren adaptarse rápidamente a estos cambios y adopten una estrategia ESG proactiva podrán posicionarse como líderes en un entorno cada vez más competitivo y consciente de la sostenibilidad; y de esta manera podrán asegurar su participación en un mercado tan relevante como lo es la U.E. Aquellas que no lo hagan corren el riesgo de ser excluidas de mercados internacionales o de perder oportunidades de financiamiento, en un mundo que cada vez demanda más responsabilidad y sostenibilidad.