Año perdido
07 de septiembre de 2020Contenido
El fútbol formativo es un proceso que no se detiene y que año a año debe preparar y entrenar a jóvenes que en algunos casos muy específicos llegarán a ser grandes estrellas. De acuerdo con algunos equipos, mas o menos uno entre dos mil jóvenes llegará a primera división, no a Europa o a ser estrella, no, simplemente llegará a jugar al menos un partido como profesional. Para las grandes estrellas la proporción es infinitamente superior. Formar jugadores es una labor compleja, que requiere paciencia, dinero y mucho trabajo, es por esto por lo que existen equipos especializados en formar jugadores, Auxerre en Francia, Argentinos Juniors en Argentina y, como no, Envigado en Colombia.
Este formativo debe estar integrado con el fútbol profesional de manera que poco a poco los mejores jóvenes puedan abrirse campo en el primer equipo. Para esto las ligas profesionales deben tener en sus reglamentos formas de incentivar la participación de estos deportistas en los torneos profesionales.
Los muchachos en proceso de formación se les identifica por el año, fulanito es 99, menganito es 2000 eso quiere decir el año en que nacieron y los ubica directamente en el lugar o equipo que debe estar jugando. Los que cumplen 20 años en el 2020, los 2000, debieron este año haber participado en los torneos superiores o deberían estar listos para empezar a jugar en sus equipos profesionales, la pandemia, como en otras situaciones cambió todo, “los 2000” perdieron su oportunidad, apenas en unos días se reanudará el torneo profesional y no hay ninguna claridad de que el futbol aficionado se juegue este año.
El lío que tienen los famosos jugadores de 2000 es que el “torneo nacional sub 20”, torneo mas importante a nivel aficionado en Colombia, no va a realizarse o va a ser casi imposible que se pueda jugar por su carácter nacional por lo menos en 2020. Si apenas ahora se empieza a hablar de fútbol profesional, el “otro” fútbol sigue en cuarentena vaya uno a saber hasta cuándo. Ahora, se podría pensar que no es tan grave y que el próximo año empiezan desde cero, el problema real es que jugadores de proyección que son figuras en sus equipos sub 20 y que nacieron en el año 2000, no van a tener la posibilidad de entrenar ni con su categoría ni con el equipo profesional por los protocolos estrictos que se tienen, lo cual los va a dejar en clara desventaja por que en 2021 ya no podrán ser catalogados como sub 20 pero tampoco van a ser considerados por sus equipos en la primera plantilla por falta de experiencia, por que no están acostumbrados a sus compañeros y por la metodología del grupo.
Lo anterior genera desmotivaciones gigantes para la “promoción 2020” del fútbol amateur en Colombia, sin contar que llevan mas de cinco meses encerrados en sus casas sin poder disfrutar de lo que realmente quieren ser en la vida, el mundo virtual se esta comiendo el mundo, pero para un joven con sueño de ser futbolista no es suficiente con un “zoom” de 45 minutos por las mañanas.
Ahora bien, creería que tanto la Difútbol como la asociación de equipos aficionados deberían buscar alternativas para que esta generación de deportistas no se pierda, propondría que el torneo de 2021 acogiera al menos parcialmente algunos jugadores nacidos en 2000 o que pudiera jugarse como un torneo sub 21. Por ahora con tantas especulaciones frente a la pandemia y al fútbol solo queda esperar a que se tomen decisiones, ojalá que no se les olviden sus jóvenes promesas.