Bava

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La semana pasada causó mucho ruido la situación del director técnico de Santa Fe, o mejor el ex director técnico el uruguayo Jorge Bava que tuvo a bien renunciar para contratar con otro club empleador que más que doblaba el salario. Los periodistas deportivos daban alaridos y decían que era una falta de seriedad que era un mercenario y no sé qué más pendejadas. Hablé con alguno y me dijo que es que el fútbol es diferente. Como no lo es, haré algunos comentarios sobre la renuncia de Bava y el contrato de trabajo de un director técnico.

Lo primero que hay que decir es que luego de la última reforma laboral, el contrato de trabajo de los jugadores profesionales de fútbol en Colombia no tiene ninguna diferencia, desde el punto de vista jurídico que la de cualquier otro trabajador. Las cláusulas de recisión se prohibieron y por lo tanto se podría utilizar una forma preimpresa de esas que venden en una papelería para vincular a un goleador a Millonarios (que tanta falta le hace).

Con los técnicos puede existir la posibilidad de pactar la dichosa cláusula de recisión, salvo eso, también es un contrato de trabajo puro y duro. Con esta aclaración sigo con Bava.

El periodista que me dijo que el fútbol es diferente no tiene ningún empacho en pedir el despido del técnico al momento de perder tres o cuatro partidos. Es un incompetente, dicen; debe irse a dirigir una escuela de señoritas o cualquier otra barbaridad se oye. Y sí, el contrato de trabajo lo puede dar por terminado el empleador y pagar la indemnización correspondiente, en los técnicos será el valor residual del contrato. La pregunta es. Si se puede despedir a un técnico prácticamente en cualquier momento, ¿por qué el técnico no puede renunciar en cualquier momento?

Cualquiera de esos periodistas cambiaría de lugar donde se los aguantan si la competencia les ofrece de salario mas de el doble de lo les paga el empleador actual. ¿Eso está bien? Eso hizo Bava y personalmente me parece lo adecuado. Supongo que le comentó a Santa Fe el aumento propuesto con el propósito de lograr algo similar y continuar dirigiendo al equipo que hizo campeón. Supongo también que sensatamente en Santa Fe le dijeron que no podían igualar la oferta de Cerro Porteño y por lo tanto lo dejaron ir.

Si el contrato de Bava tiene cláusula de recisión, seguramente deberá pagarla el entrenador o Cerro Porteño, buen dinero para Santa Fe que está saliendo de un proceso de reorganización.

Es importante entender que por más que el fútbol nos emocione, los técnicos nos lleven a un lugar cercano al cielo si ganan o al infierno si pierden, son trabajadores como cualquier otro. Adicionalmente desde el punto de vista fútbol, ni siquiera tienen períodos de inscripción, es decir, en cualquier momento se puede contratar y poner a dirigir a uno entrenador. Distinto es que no puedan dirigir dos equipos dentro del mismo torneo.

Los técnicos saben que casi nunca durarán lo pactado en el contrato, su actividad es inestable y en Colombia los presidentes son sensibles y luego de dos o más partidos perdidos ya están recibiendo hojas de vida para sustituir al profe.

En el fútbol, más que en cualquier otra actividad la plata manda y las diferencias económicas entre clubes son descomunales. En el momento en que un club europeo quiera contratar un técnico de estos lares no tendrá ningún problema desde el punto de vista económico y con un poco de tino y buenos asesores eludirá cualquier consecuencia negativa de FIFA.

Solo resta desearle suerte a Bava.