Conectividad aérea nacional: sucesos que aleccionan
13 de abril de 2019Contenido
La relevancia de los servicios de transporte aéreo domésticos ha quedado nuevamente evidenciada con el cierre de un tramo de la vía Panamericana realizado por la minga indígena del Cauca y con la desafortunada suspensión de operaciones de la Aerolínea de Antioquia -ADA.
La conectividad en el transporte aéreo doméstico había sido, desde el denominado “Foro Sector Aéreo 2030 ¿Hacia dónde debe ir la aviación en Colombia?”, realizado en abril del año pasado por el entonces recién posesionado director de la Aerocivil, una de las líneas de acción a desarrollar por la entidad, con el propósito principal de establecer las directrices que garantizaran el cumplimiento de la meta de mejoramiento de este tipo de transporte en las rutas troncales y en las regionales. Sobre estas últimas se hizo énfasis bajo el criterio de que la conectividad juega un papel fundamental en la integración, en la paz y en el crecimiento del turismo como nuevo motor del desarrollo.
En ese sentido puede afirmarse, que afortunadamente para el país, y posiblemente a pesar de los esfuerzos de los políticos para politizar (valga la redundancia) la Aerocivil, la entidad ya había anticipado la necesidad de fortalecer los servicios de transporte doméstico, con lo que para los momentos críticos del cierre y de la suspensión de ADA, ya se habían tomado medidas que junto con otras que en esas mismas coyunturas se adoptaron, permitieron minimizar en algún grado las consecuencias de estas complejas circunstancias.
Una primera decisión del año pasado -Resolución 1777 del 21 de junio de 2018-, posibilitó a los aerotaxis y a las empresas regionales la venta de tiquetes individuales (lo que no nunca antes se había autorizado, por tratarse de servicios no regulares en los que se vende el vuelo, no la silla) en rutas no operadas en forma regular, opción que efectivamente tuvo como consecuencia que varios operadores decidieran ampliar sus servicios, para un total de 26 rutas domésticas nuevas, operadas por cuatro de las 63 empresas de aerotaxis y regionales que tienen permiso de operación en Colombia.
El 31 de enero de este año, la Aerocivil, luego de encontrar que los efectos de la medida habían sido positivos tanto para las empresas, como para los usuarios, amplió esta prerrogativa mediante Resolución 280, lo que sirvió para que más transportadores pudieran ampararse en ella, de manera que para el momento del cierre de la vía y de la suspensión de operaciones de ADA, ya se había allanado en parte el camino para solventar de alguna manera estos dos eventos.
Sobre el cierre de la vía Panamericana, fueron fundamentales la gestión de la Aerocivil y la cooperación de aerolíneas como Easyfly y Avianca, que se comprometieron a realizar vuelos especiales y a incrementar frecuencias, respectivamente, tanto desde Cali como desde Popayán, a unas tarifas, que si bien no son las mismas del transporte terrestre, han resultado bastante favorables teniendo en cuenta los costos de operación que deben asumir las empresas de transporte aéreo en Colombia, a las que sin compasión se les imponen cada vez más cargas. Por lo que se refiere a la operación de ADA, deben iniciarse operaciones en 17 nuevas rutas desde el Olaya Herrera. Aeroejecutivos, Searca y Sarpa comercializan ya sus servicios, la primera en forma directa y las segundas en la plataforma de Grupo San German Express.