IA reduce 70% los tiempos en arbitraje internacional
05 de agosto de 2025Contenido
El 90% de los profesionales del arbitraje internacional planea usar inteligencia artificial, según el estudio elaborado en el 2025 por Queen Mary University of London y White & Case, generando ahorros en el rango de cientos de miles de dólares por caso.
Allí quedó claro que mientras el 77% de los encuestados afirma que la IA nunca debe tomar decisiones finales, el 54% ya la usa para ahorrar tiempo y el 44% para reducir costos, confirmando que los servicios legales apalancados en tecnología, están transformando radicalmente cómo se resuelven las disputas comerciales internacionales. Y me atrevo a decir, nacionales también.
Para 2030, el estudio proyecta que el 52% de árbitros dependerán rutinariamente de IA, dando orígen a nuevos roles profesionales híbridos. Ya no será suficiente ser un “buen abogado” sino manejar de forma adecuada y con responsabilidad las herramientas que día a día están surgiendo y/o perfeccionandose.
Sin embargo, la clave está en el equilibrio: la IA como potenciador de eficiencia y no como reemplazo del juicio humano. Las aplicaciones principales incluyen investigación legal automatizada, análisis predictivo de jurisprudencia, traducción instantánea y gestión documental inteligente. Igualmente, la tecnología de revisión documental predictiva, según dicho estudio, reduce en aproximadamente 50 veces el tiempo de análisis.
La administración de justicia, certera pero eficiente, se erige como un valor para los empresarios. Y es allí donde la eficiencia y el uso de tecnología puede apoyar: el mercado global de tecnología legal crecerá de $26.7 mil millones actuales a $55 mil millones en 2029, según las proyecciones. En arbitraje internacional, las instituciones líderes reportan resultados contundentes: ICC procesó 890 casos en 2023, con el 56% de sus procedimientos expeditos resueltos en 6 meses. LCIA reporta una mediana de 16 meses para resolver disputas, mientras el promedio judicial latinoamericano supera los 28 meses solo en primera instancia.
Sin embargo, persisten desafíos significativos. El 51% de profesionales teme errores y sesgos de la IA, mientras el 47% se preocupa por la confidencialidad. Estas preocupaciones legítimas están impulsando el desarrollo de marcos regulatorios como las nuevas guías del Chartered Institute of Arbitrators 2025 y protocolos de ciberseguridad especializados.
La inversión en capacitación especializada y la actualización de cláusulas arbitrales, para incluir provisiones digitales son imperativos inmediatos para mantener competitividad internacional en nuestro país.