La nueva alianza para la aduana del Pacífico
25 de septiembre de 2018Contenido
El lunes 17 de septiembre, convocado por Fitac, se realizó el evento denominado “La Transformación de la Aduana como Factor de Éxito de la Alianza del Pacífico”, al cual asistieron representantes de México, Perú y Chile que conjuntamente con la Andi, Analdex y Andicomex, se reunieron con 400 empresarios, para escuchar los planteamientos de cómo los cuatro países que integran la Alianza del Pacífico, si quieren convertirse en el mejor destino de inversión de América Latina, en especial para inversiones Asiáticas, deberán tener aduanas con estándares similares de eficiencia, operatividad y sobre todo interconectividad en sus procedimientos.
Muy interesante fue el ejercicio académico realizado en conjunto con las Universidades Sergio Arboleda y Externado de Colombia, donde evaluaron uno a uno los principales regímenes aduaneros, los mecanismos de seguridad jurídica y el régimen sancionatorio, en cada uno de los cuatro países de la Alianza.
Además, escuchamos testimonios de representantes de la aduana mexicana, quienes nos compartieron cómo fue necesario modificar la Constitución Nacional para permitir en la frontera la permanencia de funcionarios aduaneros armados de Estados Unidos y la compatibilización de las dos aduanas que hoy trabajan en equipo y que registra un movimiento superior a los US$2 billones al día, con un movimiento de más de 15.000 camiones.
La representante del Perú dejó boquiabierta a la audiencia con los nuevos sistemas en tiempo real de la aduana peruana que monitorea en horas la eficiencia de sus procedimientos.
No menos interesante fue la experiencia Chilena en donde se adaptó el sistema de aduana Norteamericana en cuanto a procedimientos e informática.
Las principales conclusiones de este importantísimo foro fueron las siguientes:
1. La ampliación del Comité Aduanero de la Alianza del Pacífico, a cargo del Perú, para que además de autoridades aduaneras, sea integrado por gremios y operadores del comercio internacional y la academia.
2. La oferta que Fitac le hizo al director de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, Dian, José Andrés Romero, de que la nueva reforma del estatuto aduanero se analizara a la luz de las legislaciones de la Alianza del Pacífico, para empezar su armonización.
3. La propuesta de digitalización y compatibilización de los regímenes aduaneros de los cuatro países mediante procedimientos electrónicos, eliminando así la impresión innecesaria de formularios, como aún se exige en Colombia y no en los demás países.
4. La homologación del régimen de operadores económicos autorizados entre los cuatro países.
5. La interoperabilidad de las ventanillas únicas de comercio exterior, que en el caso Colombiano debe integrase con la Dian y demás entidades fitosanitarias.
Debe celebrarse esta iniciativa de Fitac, que por primera vez nos saca del contexto local para observar muy exitosas experiencias internacionales, a las cuales, obligatoriamente tendremos que acceder, si deseamos tener una Aduana del Siglo XXI, separada funcionalmente en su misión y objetivos de la actividad recaudatoria y como facilitadora del comercio exterior y que incida de manera importante con el incremento de las exportaciones per cápita, la conexión de nuestro comercio exterior con cadenas globales de valor y en hacer del intercambio comercial internacional una actividad de valor agregado y generación de empleo para el país.