Sostenibilidad

Retos y aprendizajes del primer año de implementación de las IFRS S1 y S2

22 de septiembre de 2025

Patricia Mendoza

Socia Líder de Servicios Cambio Climático y Sostenibilidad de EY Colombia
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Contenido

En 2023, el Consejo de Normas Internacionales de Sostenibilidad (ISSB, por sus siglas en inglés) publicó dos estándares que marcan un hito en esta transformación: las IFRS S1 y S2. El primero, IFRS S1, establece los requisitos generales para la divulgación de riesgos y oportunidades relacionados con la sostenibilidad; el segundo, IFRS S2, se concentra de manera específica en el cambio climático.

Su propósito es claro: ofrecer un marco global que permita mejorar la transparencia y proporcionar un lenguaje común para los reportes, con el fin de apoyar decisiones de inversión más informadas y estratégicas.

Tras un año de acompañar procesos de alineación en distintos sectores y países, hemos identificado cinco desafíos clave que las empresas deben gestionar para lograr una implementación exitosa:

1. Integración entre sostenibilidad, finanzas y riesgos:

La generación de información y reportes coherentes depende de la colaboración activa entre sostenibilidad, finanzas y gestión de riesgos. La creación de equipos multidisciplinarios, con canales claros de comunicación y objetivos compartidos, facilita el intercambio de datos, la interpretación conjunta y una toma de decisiones más sólida.

2. Identificación sistemática de riesgos y oportunidades ESG:

Muchas organizaciones todavía no tienen metodologías formales para evaluar los riesgos y oportunidades en factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG). Sin este análisis, se vuelve difícil anticipar amenazas o capitalizar nuevas tendencias. Por eso, es clave integrar la evaluación de riesgos ESG en la estrategia corporativa, lo que permite priorizar acciones y reportar información relevante.

3. Aplicación del concepto de materialidad financiera en sostenibilidad:

La noción de “materialidad” en información financiera no siempre se entiende igual en el ámbito ESG. Es clave que las áreas financieras y de sostenibilidad trabajen juntas para definir qué aspectos son realmente significativos para los inversionistas, alineando criterios y evitando duplicidades o inconsistencias.

4. Conexión efectiva entre datos financieros y de sostenibilidad:

Este es uno de los puntos neurálgicos de las nuevas normas. No basta con tener reportes ESG separados; es necesario que la información de sostenibilidad se vincule desde el origen con los datos financieros, mostrando cómo los compromisos ambientales o sociales impactan en la situación económica de la empresa.

5. Ambiente de control para la información ESG:

La información de sostenibilidad a menudo se gestiona fuera del control financiero, lo que aumenta el riesgo de inconsistencias. Para asegurar la precisión y trazabilidad de los reportes ESG, es crucial establecer controles internos específicos y documentar los procedimientos, además de capacitar al personal y realizar auditorías periódicas.

Más allá del cumplimiento: una oportunidad estratégica

El proceso implica definir estatutos de gobernanza claros, capacitar a los responsables de cada proceso, establecer mecanismos de control robustos y, sobre todo, garantizar coherencia entre lo que se comunica interna y externamente.

La recopilación y análisis de datos ESG se convierte en un eje crítico. Las empresas que logren integrar estos datos en sus sistemas de información financiera, con controles de calidad y procesos de verificación, no solo estarán listas para cumplir con auditorías o requerimientos regulatorios, sino que también tendrán la capacidad de identificar tendencias y áreas de mejora con mayor agilidad.

En paralelo, el aseguramiento de datos ESG gana protagonismo. Algunos países ya lo exigen de manera obligatoria, lo que anticipa un estándar global hacia la verificación externa de esta información. Estar preparados para este escenario no solo reducirá riesgos de reputación, sino que reforzará la credibilidad frente a inversionistas y otros grupos de interés.