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El nuevo Plan Nacional de Desarrollo modifica el artículo 10 de la Ley 388 de 1997 con el fin de incluir, entre otras disposiciones, nuevas determinantes ambientales que deberán ser tenidas en cuenta por los municipios y distritos en la elaboración y adopción de sus planes de ordenamiento territorial.
¿Cuáles son las nuevas determinantes ambientales?
Dentro de las nuevas determinantes ambientales se encuentran la protección de los ecosistemas, el ciclo del agua, y la gestión del cambio climático, figuras que anteriormente no se encontraban de manera explícita en la Ley 388 de 1997.
¿Cuáles son las implicaciones de estas nuevas determinantes?
Será muy importante analizar la reglamentación que se expida en relación con estas nuevas determinantes, a fin de conocer con mayor profundidad sus alcances e implicaciones. De momento, se sabe que existe un acta presidencial que establece para los meses de octubre y noviembre de 2023, la expedición de dicha reglamentación.
No obstante, es posible resaltar a partir de la información disponible que, en algunos casos, los conceptos de estas nuevas determinantes pueden llegar a ser muy generales o amplios; y con su aplicación acabarían protegiéndose zonas que no lo requieren desde el punto de vista técnico; o cobijándose sin necesidad grandes territorios, restringiendo así su uso y desarrollo injustificadamente.
¿Qué retos y oportunidades representan estas nuevas determinantes?
Como se mencionaba antes, las nuevas determinantes pueden partir de conceptos muy generales o amplios, lo cual significa que para su correcta implementación o aplicación se requerirá de mayor precisión o concreción con el fin de no generar inseguridad jurídica o incertidumbre en los procesos de desarrollo territorial.
De igual manera, y como ocurre con toda nueva norma, es posible que se presenten diferencias de posiciones e incluso de interpretación en cuanto a su aplicación; por lo que la pedagogía tanto para las autoridades como para los ciudadanos y usuarios será fundamental.
Desde otro punto de vista, las nuevas determinantes ambientales podrían ser la oportunidad para salvaguardar, en algunos casos, zonas que técnicamente requieran de protección y que no hayan cobijadas por normas anteriores por distintas razones.
En todo caso, habrá que ver la reglamentación que se expida al respecto para las determinantes ambientales, ya que estas son un factor destacado en el proceso de ordenamiento territorial que incide de forma directa en la calidad de vida de todos los habitantes del país.