Contenido
El sector inmobiliario es de los más atractivos para los inversionistas por su durabilidad, heterogeneidad y seguridad. Sin embargo, los montos mínimos de inversión que exigen los vehículos convencionales en Colombia para este tipo de proyectos suelen ser tan altos que excluyen inversionistas con recursos libres y disponibles. Para esto, el crowdfunding propone una alternativa de democratización de finanzas, aprovechando el poder de la globalización e hiperconectividad del internet, así como el boom de las Fintech.
¿Qué es el “crowdfunding de inversión”?
Crowdfunding es un modelo de financiación por el cual, el desarrollador de un proyecto (el “Receptor”) se apalanca en los recursos de varios terceros que suelen hacer “pequeños aportes” (los “Aportantes”), a cambio de alguna retribución futura (acciones, bonos, etc.), para desarrollar una actividad productiva, como lo puede ser la compra de un local comercial para luego arrendarlo.
Gracias al auge de tecnología, los Aportantes invierten en los proyectos a través páginas web o aplicaciones, lo que ha impulsado el desarrollo inmobiliario en varios países como Estados Unidos y España, pues una persona común y corriente puede invertir en el mercado inmobiliario con poco dinero, desde su celular. Esta modalidad de recaudo está en boca de los inversionistas del sector, pues permite financiar proyectos inmobiliarios sin depender de grandes inversionistas. Por ello, es importante considerar el crowdfunding frente a otras formas de apalancamiento (financiación tradicional, leasings, hipotecas).
¿Cómo funciona en Colombia?
El crowdfunding pone en contacto directo a los Receptores con la multiplicidad de Aportantes, mediante un intermediario. En Colombia, es obligatorio que el intermediario sea una sociedad de financiación colaborativa, que, junto con las bolsas de valores y los sistemas de registro de valores autorizados, son las entidades autorizadas y vigiladas por la Superintendencia Financiera para gestionar esta actividad. Para el caso colombiano, el crowdfunding inmobiliario debe ser destinado a proyectos productivos de inversión, como podrían ser el desarrollo de proyectos de vivienda o compra de terrenos para instalar parques solares.
Adicionalmente, este modelo puede ser utilizado para proyectos de diferente tamaño y naturaleza, que van desde la construcción y puesta en marcha de un hotel, hasta desarrollar esquemas de house flipping.
¿Cuál es la diferencia con un Fondo inmobiliario?
Algunas de las diferencias son que los Fondos requieren un monto mínimo de inversión más alto que en el crowdfunding. Esto permite que los Aportantes puedan invertir con montos más bajos y, por lo tanto, pone la inversión al alcance de más personas. Otra diferencia importante radica en que el Crowdfunding es esencialmente abierto al público por medio de las plataformas web, en las cuales, si bien hay que agotar un proceso de vinculación, este busca ser menos exigente que el procedimiento que se adelanta ante un Fondo de Inversión. Una última diferencia es que, como regla general, los Fondos suelen tener un portafolio de inversiones diversificado con varios activos, mientras que la regla general en el Crowdfunding son proyectos individuales y concretos.