Cómo funciona el salario integral, cuándo aplica y qué ventajas tiene versus el ordinario
Este salario aplica para personal de confianza que está disponible cuando la empresa lo necesita, es frecuente en cargos directivos
05 de febrero de 2024Contenido
Entre las diversas figuras del mundo laboral como contratos o prestación de servicios también están los tipos de salarios. Está el ordinario, el más conocido, en el que el empleador además de realizar el pago del salario al empleador, realiza el pago de prestaciones sociales legales y extralegales, cesantías,también se puede incluir un auxilio de transporte (si aplica), y se realizan racargos en caso de trabajo extra, nocturno, dominicales y festivos.
Pero también está el salario integral en el que 30% corresponde a prestaciones y 70% a los ingresos; aquí ya está contemplado el trabajo nocturno, el extraordinario, el dominical y festivo, y las primas legales y extralegales, las cesantías y no hay subsidios.
Es decir, se incluye toda la remuneración y lo concerniente a lo prestacional, por lo cual el empleado se tendrá que encargar de estos pagos. Lo que no está incluido en este salario son las vacaciones, los aportes a seguridad social, los aportes parafiscales,la indemnización por despido injustificado, y la sanción moratoria por no pagar el salario al terminar el contrato de trabajo.
Para hacer efectivo el pago integral, su valor mínimo es de 13 salarios mínimos mensuales, ya que 10 smmlv son para el factor salarial y tres smmlv son para el factor prestacional, el cual no puede ser inferior a 30% del factor salarial. Pero el empleador siempre podrá pagar un salario mayor.
Para 2024, el salario mínimo quedó en $1.300.000, por lo cual el salario integral sería de 13 salarios mínimos, $16.900.000. Normalmente este salario aplica para el personal de confianza que está disponible cuando la empresa lo necesita, por ello es frecuente en cargos directivos.
En caso de que aplique a este perfil es posible pasar de un salario ordinario a uno integral al lograr un acuerdo entre el empleado y el empleador. Dentro de las ventajas a considerar para un trabajador está tener un flujo de caja más alto y cesantías mayores. Y para las empresas, aunque puede representar un mayor costo, se puede simplificar el proceso de nómina.