Firmas de abogados internacionales cierran sus oficinas en Kiev y ofrecen reubicación
Algunos despachos jurídicos son Baker McKenzie, CMS y Dentons, los cuales cerraron ayer sus oficinas en Kiev, y trabajan en alternativas
25 de febrero de 2022Contenido
Mientras el ejército ruso avanza hacia Kiev, ciudadanos y compañías de la capital Ucrania huyen de las bombas.
Así, tras la declaración de la ley marcial por el presidente ucranio Volodymyr Zelenskyy algunas firmas internacionales con presencia en el país han decidido salir de Ucrania "hasta que la situación se estabilice".
Según informa tanto The Lawyer como The Washington Post, Baker McKenzie, CMS y Dentons cerraron ayer sus oficinas en Kiev.
En un comunicado interno, Baker McKenzie señala que: "A la luz de la acción militar en curso en Ucrania, hemos cerrado nuestra oficina en Kiev hasta que la situación se estabilice. Estamos monitoreando de cerca los desarrollos en todo momento y estamos haciendo todo lo posible para apoyar a nuestra gente durante estas circunstancias desafiantes".
Según señalan desde Baker, la oficina de Kiev cuenta con 15 abogados y 100 empleados en total. "Su seguridad y bienestar es nuestra prioridad número uno y nuestros pensamientos están con ellos y todos los afectados en este momento extremadamente difícil. En la medida de lo posible, nuestros socios están trabajando con los clientes afectados para determinar las opciones para continuar brindando asistencia legal en otros lugares, y estamos brindando más apoyo a través de nuestra red de oficinas en toda Europa", añadió un portavoz de la compañía a los medios internacionales.
CMS, que cuenta con más de 30 abogados en la región, también cerró su oficina en Kiev y ofrece opciones de reubicación al personal afectado. Un portavoz del despacho afirmó en un comunicado que "aunque nuestras líneas de comunicación permanecen abiertas, hemos tomado la decisión de cerrar nuestra oficina de Kiev hasta nuevo aviso. Nuestros pensamientos están con nuestros colegas, clientes y amigos durante este momento difícil. Nosotros, como muchos, esperamos una resolución pacífica de este conflicto".
Dentons también abandona la capital de Ucrania al cerrar su oficina en Kiev y ha establecido un grupo de trabajo para "supervisar y gestionar la situación de crisis", señaló un portavoz. "Nuestra principal preocupación sigue siendo la seguridad de nuestra gente tanto en Ucrania como en Rusia. Estamos en contacto regular con nuestro equipo en Kiev y brindamos a nuestros colegas la asistencia que necesitan, incluida la asistencia para la reubicación en los países vecinos".
Por su parte, Kinstellar, firma europea con presencia en Europa central y el este también ha cerrado su oficina en la capital ucraniana. Se cree que la sede cerró ayer y se le explicó al personal de su oficina, unas 60 personas que, debían trabajar desde casa indefinidamente.
La firma, que anteriormente era una red de cuatro oficinas de Linklaters en Europa, había estado implementando medidas para proteger a sus abogados y socios en Kiev durante varias semanas. Entre otras iniciativas crearon un fondo para apoyar financieramente a sus trabajadores en Ucrania, abrieron una línea de atención telefónica las 24 horas y ofrecieron a sus trabajadores la posibilidad de trasladarse a una de las otras 10 oficinas de la empresa en Europa. Se entiende que la mayoría de sus abogados ucranianos optaron por permanecer en Kiev a pesar de la escalada de tensiones.