Lo que viene en el sector de fusiones y adquisiciones este año, pasadas las elecciones
Transacciones en las industrias de minería y petróleo perderán dinamismo, mientras avanzan las asociadas a transición energética
28 de junio de 2022Contenido
Aunque los resultados de las elecciones no han disipado la incertidumbre en los mercados, todo parece indicar que esa situación no se ha trasladado, por el momento, a las operaciones de fusiones y adquisiciones (M&A), que han mostrado una buena tracción en el primer semestre. Sin embargo, se mantiene un ambiente de cautela, pues las decisiones que anuncie el próximo gobierno podrían cambiar ese balance.
Entre enero y mayo de 2022, según cifras de TTR, se realizaron en Colombia 103 operaciones por un valor agregado de US$3.212 millones, un monto 1,9% menor al registrado en el mismo periodo de 2021, pero que muestra un alza de 15,7% en el número de transacciones.
Durante la campaña electoral, uno de los temas recurrentes fue la posibilidad de una fuga de capitales, sin embargo, varios abogados del área sostienen que el país sigue siendo atractivo y los capitales siguen llegando.
“Las sinergia con la que venimos no debería afectarse como consecuencia de la coyuntura política, porque la economía está una situación muy positiva y el país es atractivo. Eso va a seguir, y no hemos visto que se haya mermado la actividad”, dijo Camilo Martínez, socio de DLA Piper Martínez Beltrán.
En la misma línea Andrés Crump, socio de Baker McKenzie, dijo que las perspectivas para lo que resta del año son positivas, porque los inversionistas creen que el país seguirá siendo un mercado atractivo para la inversión.
“Además, la devaluación del peso frente al dólar en los últimos dos años ha hecho que los precios de algunos activos sean más atractivos. Estamos viendo más jugadores estratégicos que financieros entrando al mercado”, anotó.
Eso no quiere decir que las operaciones sean inmunes a la incertidumbre política, pues si bien las inversiones normalmente se hacen con horizontes a mediano y largo plazo, la coyuntura puede afectar ciertas decisiones.
“Hay razones que nos llevan a pensar que el dinamismo se mantendrá a lo largo del año, Esta tendencia podría verse afectada si el nuevo gobierno se aparta de los planteamientos que hemos visto hasta el momento. Aunque todavía está muy reciente, por ahora no vemos una tendencia a la suspensión de transacciones ni fugas de capitales, por el contrario, creemos que se respira un ambiente positivo”, dijo Juan Felipe Vera, socio de Cuatrecasas, que agregó que el comportamiento del dólar y la nueva reforma tributaria podrían inclinar la balanza en la toma de decisiones.
Aunque, en general, los expertos coinciden en que, de momento, la situación y la perspectiva son positivas y no se registran movimientos drásticos por cuenta de los resultados electorales, hay algunos más cautelosos.
“Para el segundo semestre es innegable que hay incertidumbre en el mercado. En el corto plazo es posible que algunos inversionistas prefieran hacer una pausa mientras se definen variables relevantes, pero en el mediano y largo plazo esperamos que la actividad de M&A mantenga la tendencia creciente de la última década”, anotó Dario Laguado, socio del área de Corporativo de Brigard Urrutia.
Una opinión parecida tiene Juan Carlos Rocha, socio de PPU, quien anotó que si bien hay un buen volumen de transacciones que están en marcha y deberían cerrarse en el tercer trimestre, habrá que esperar las decisiones que anuncie la nueva administración para tener una mayor claridad sobre lo que podría suceder para el último periodo del año.
“Las operaciones que están programadas para cerrar en el último trimestre pueden sufrir alteraciones asociadas o derivadas de las decisiones que adopte el nuevo gobierno”, explicó.
Todos los consultados coinciden en que, en todo caso, las transacciones en las industrias de minería, petróleo y gas perderán dinamismo, por las banderas del Presidente electo para ese sector. En contraste, esperan que las operaciones mantengan su buen ritmo en todas las industrias relacionadas con la transición energética y el cambio climático. Además, se espera un buen desempeño en las transacciones asociadas a consumo masivo, fintech, nuevas tecnologías, turismo, servicios y salud.