"No es conveniente pensar en una reforma laboral que no va a aumentar el empleo"

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En el marco del foro LR, que se realizó en asocio con Scola Abogados, ‘Los retos del mercado laboral más allá de la reforma’, en el que se buscó analizar los principales aspectos del mercado laboral colombiano y la reforma laboral, tuvo lugar el panel ‘Lo bueno, lo malo y lo feo del mercado laboral’, que tuvo como ponentes a José Ignacio López, presidente de Anif; Miguel Uribe, senador de la República; y Diego Valdivieso, socio de Scola Abogados.

Entrados en materia, inicialmente el panelista José Ignacio López, se pronunció respecto a la reforma laboral afirmando que si es aprobada se tendrá un “efecto adverso, sobre todo en un momento donde la economía no está creciendo mucho, la reforma encarecería el costo de la formalidad y haría que la economía entrara en un periodo de inactividad”.

Resaltó, además, que el país debe buscar reducir la informalidad y la meta debería ser aumentar la formalidad, en este sentido afirmó que “no es conveniente pensar en una reforma laboral que no tiene como objetivo aumentar el empleo en el país”.

Por su parte Miguel Uribe, afirmó que en esta reforma, el Gobierno ha planteado una discusión ideológica, no técnica. “Cuando hablamos de reforma laboral debe ser con el objetivo de crear empleo”. Al final de esta intervención resaltó además que esta reforma destruiría el empleo, sobre todo para jóvenes y mujeres por el aumento de costos laborales que cerrarían las ofertas de trabajo y en esta medida, “esta reforma no beneficia a nadie”.

El tercer panelista, Diego Valdivieso, resaltó al respecto que la reforma presenta un panorama que evidencia la necesidad de un cambio en el ámbito laboral de los colombianos. Sin embargo agregó que “está mal enfatizada”.

De acuerdo con el experto el punto de relevancia con este proyecto se trata de que “la reforma esta ideológicamente comprometida” , pues no se tiene en cuenta la realidad del país en términos de informalidad, por ejemplo.

Así las cosas, la perspectiva acerca de la reforma laboral no fue positiva, pues los expertos coincidieron en que esta al final tiene una labor social de fondo, pero lo que se prevé por lo que se ha dejado ver del proyecto, es que tal como se plantea, dicha reforma acabaría con el empleo e incluso llegaría a fomentar la informalidad.

Como estrategias para evitar un impacto negativo de esta reforma, Valdiveso afirmó se requiere “permitir un sistema de aseguramiento social que converse con la parcialidad de los tiempos de trabajo, y con la proporcionalidad de la cotización con base en los ingresos”.

Uribe añadió a lo anterior que se debe considerar que el empleo formal va conectado con la seguridad social. “Si se genera empleo formal, lleva a las personas a poder ahorrar, cotizar y poder pensionarse. Lo que tenemos que hacer es disminuir costos laborales. No se trata de bajarle el sueldo al trabajador pero el costo para el empleador debe ser el menor posible porque permite generar empleo y fortalecer las empresas”.

Por otro lado, López coincidió en que el objetivo de la reforma debería ser la generación de empleo. Sin embargo, afirmó que deberían haber mecanismos más flexibles de negociación del salario pues no es lo mismo en todos los rincones del país y mientras esto sucede “uno de los atajos debe garantizar incluir a los jóvenes en el mercado laboral, por eso de deberían reducir los costos laborales”.

Entre las conclusiones, se destacó que se requiere debate pues las dimensiones de impacto de la reforma son amplias. Por ejemplo el hecho de laboralizar el contrato de aprendizaje, implica auxilio de transporte que cuesta 12,5% del salario mínimo, subir un 25% de los ingresos porque se lleva al aprendiz a un 100% del salario mínimo.

Otro punto es la defensa de la iniciativa privada pues esto permite la generación de empleo, pago de impuestos e incluso política social. Y finalmente, López afirmó que la reforma va en contravía de lo que requiere el país.