Recomendaciones para empleados y empleadores en las celebraciones de fin de año

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Falta poco menos de dos meses para diciembre y ya se empieza a sentir un ambiente de festividad por los pasillos de las empresas. Aunque para los trabajadores, el hecho de que se acerque diciembre es sinónimo de felicidad, lo cierto es que para recursos humanos, estas fechas significan un trabajo extra, en especial si la empresa realiza una fiesta de fin de año.

Estas fiestas suelen ser un espacio de diversión en agradecimiento a los trabajadores, pero no hay que olvidar verlas con la lupa legal. En primer lugar, los empleados y el empleador deben recordar que este sigue siendo un espacio laboral y las reglas de la oficina se trasladan al encuentro. Por ende, los trabajadores no deben ser ajenos a sus responsabilidades y el empleador debe garantizar que los empleados estén protegidos durante la fiesta.

Tal como lo precisó Camilo Mutis, director del área de práctica de Laboral de Brigard Urrutia, las fiestas navideñas son momentos en los que es más alta la posibilidad de que ocurran incidentes de convivencia, por lo que es recomendable reforzar el mensaje de prevención y recordar que es un espacio habilitado por el empleador para la integración de sus trabajadores. "Es un buen momento para iniciar las medidas de prevención de conductas de acoso de conformidad con lo establecido en la reciente Ley 2365 de 2024", aseguró el director.

Vicente Umaña, socio de Posse Herrera Ruiz, explicó que hay múltiples acciones preventivas que los empleadores pueden adoptar en el marco de las celebraciones de fin de año, dentro de las cuales se destaca la de informar a la ARL sobre el evento que se llevará a cabo. “Cuando se presente un accidente en el desarrollo de este tipo de actividades recreativas patrocinadas por las empresas, este se considerará de origen laboral conforme la Ley 1562 de 2012, por lo que la ARL deberá responder por todas las prestaciones económicas y/o asistenciales que se deriven del suceso”, dijo el socio.

Por lo tanto, es recomendable informar a la ARL el número de trabajadores que participarán, el lugar donde se llevará a cabo el evento, la duración y cualquier otra información que pueda ser relevante al momento de adelantar este tipo de actividades recreativas.

Umaña explicó que otra de las acciones que se puede realizar en el marco de las celebraciones es la revisión de las condiciones del lugar en donde se realizará el evento, con el fin de analizar e identificar riesgos que se puedan presentar y así implementar los mecanismos para evitar que se concreten en accidentes. “Por ejemplo, las empresas pueden implementar controles logísticos, como lo son controles en el ingreso, en el expendio y consumo de bebidas alcohólicas e, incluso, la contratación del servicio de conductor elegido, con el fin de evitar que se presente un accidente”, dijo el abogado.

Por último, se sugiere revisar el estado de cumplimiento de las obligaciones laborales por parte de los trabajadores de los contratistas y/o subcontratistas (si aplica) que sean contratados para prestar los servicios el día de la celebración. Esto debido a posibles reclamaciones de responsabilidad que se puedan presentar en caso de un accidente de trabajadores o frente a terceros, para lo cual también se recomienda contar con una póliza que pueda cubrir este tipo de riesgos.

Sin embargo, así como los empleadores tienen responsabilidades, los empleados no deben olvidar que, aunque sea una celebración, sigue siendo un espacio laboral. "Si surge alguna falta disciplinaria, se podría dar apertura al correspondiente proceso por parte de la empresa, con la imposición de sanciones acorde al Reglamento Interno de Trabajo", dijo Eliana Triviño, directora de asuntos laborales y seguridad social de Riveros Victoria Abogados.

Agregó que es normal que en un ambiente de esparcimiento algunos trabajadores se sientan libres de comportarse como si estuvieran en una celebración con sus amigos, pero tratándose de fiestas laborales no debe perder de vista que tanto los deberes, como prohibiciones establecidas en las normas y el Reglamento Interno de trabajo se aplican en su integridad, por lo que debe evitar comportamientos de indisciplina, actos inmorales e incluso delictuoso, que puedan dar lugar a la terminación del contrato de trabajo con justa causa.

En este orden de ideas, se debe respetar tanto a los jefes como a los compañeros y evitar riñas, acoso, ofensas, entre otras conductas si no quiere que la fiesta acabe con una terminación del contrato.