Riesgo electoral cayó 23% respecto a 2018 según Misión de Observación Electoral (MOE)
Según la entidad, Colombia tiene 131 municipios con riesgo de fraude electoral (fraude y violencia sobre los actores de la democracia)
10 de febrero de 2022Contenido
La Misión de Observación Electoral presentó los resultados del estudio “Mapas y factores de Riesgo Electoral-Elecciones nacionales 2022”, en el que se estableció que Colombia tiene 131 municipios con riesgo de fraude electoral (fraude y violencia sobre los actores de la democracia), lo que representa una disminución de 23% comparado con los comicios de 2018.
Según Alejandra Barrios, directora de la MOE, las variables activas que incidirán durante el proceso electoral de 2022 tienen que ver con los hechos de violencia que dificultan la democracia. “Van marcando una dinámica propia y se modifican mes a mes”, dijo. Entre las variables están la presencia de grupos armados ilegales, desplazamiento forzado y la censura a la libertad de prensa.
Sobre esta última, explicó que “se da contra periodistas que cubren temas políticos, electorales o de corrupción relacionada con la contratación en municipios donde se asientan”.
Por otro lado, las variables pasivas son aquellas que varían de uno a otro proceso electoral: niveles de participación electoral, de votos nulos, de tarjetones no marcados y de dominio electoral. En cuanto a la matriz de riesgos presentada, hay otros ítems a tener en consideración.
Por ejemplo, la transparencia y seguridad del proceso electoral incluyen puntos como la transparencia en la contratación y el papel de nuevas tecnologías en los comicios. Por otro lado, la debilidad institucional hace parte de la matriz por cuanto los tribunales de garantías electorales deben estar cerca de estos procesos. Además, Barrios aseguró que otro punto importantes es “la baja implementación de la biometría cuando se tienen problemas de suplantación e identificación y el poco alcance de la pedagogía”.
Otro punto a tener en cuenta en la matriz de riesgos es la comunicación, pues los discursos de odio, estigmatización y la apología a la violencia son factores que pueden representar trabas al correcto ejercicio democrático de las jornadas electorales. Además, en estos comicios habrá limitaciones a la participación, derivadas principalmente del covid-19 y la dificultad de acceso a los puestos de votación.
Considerando todos los factores mencionados, la MOE señaló que hay 131 municipios que presentan riesgo de violencia o fraude electoral. Esta cifra se calculó promediando tres factores; el primero tiene que ver con los indicativos de fraude electoral del Senado, presentes en 323 municipios, que representan 28,7%. El segundo factor está relacionado con el fraude electoral para Cámara, con 335 municipios en riesgo, que representan 29,8%. El tercer factor, en cambio, es la violencia que puede incidir en las jornadas: un total de 319 (28,4%) municipios país tienen alto riesgo de padecer este problema durante los comicios.
La cifra de más de 130 municipios que presentan riesgos electorales y de violencia es la coincidencia de zonas que cumplen con los factores anteriormente descritos.
Estos municipios, a su vez, presentan riesgos en varios niveles: medio, alto y extremo. En el nivel más extremo hay 49 territorios; sin embargo, aunque el número puede parecer elevado, en comparación con las elecciones celebradas en 2018, se redujo en 15 municipios, lo que representa una variación de -23%.
Por otro lado, los municipios que registran un riesgo alto son 65, con lo que no hay variación frente a 2018, cuando el número fue exactamente igual. En cambio, se identificaron 17 territorios con un riesgo medio, es decir, 24 menos de los que estaban en esa categoría en las elecciones de hace cuatro años. En términos porcentuales, la caída fue de 59%.
Sobre los resultados generales, englobando los tres niveles de riesgo del índice, la directora de la MOE celebró que el indicador haya cedido en 23%. “El número de municipios en riesgo ha ido disminuyendo y eso es una buena noticia. El trabajo que se ha hecho ha tenido un impacto”, dijo, aunque advirtió que todavía es mucho el camino que queda por recorrer.