¿Se arrepintió de una compra?, conozca cómo puede ejercer su derecho al retracto

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El derecho al retracto en Colombia es una herramienta para los consumidores que buscan deshacer una compra o contrato de manera legal, pero su aplicación está sujeta a condiciones específicas. Establecido en el Estatuto del Consumidor, este derecho permite a los compradores arrepentirse de ciertas transacciones, siempre y cuando cumplan con los requisitos establecidos.

Según Catalina Gutiérrez, asociada en Holland & Knight, el derecho al retracto aplica en casos como ventas financiadas directamente por el proveedor, tiempos compartidos, transacciones realizadas a distancia y métodos de venta no tradicionales. “En caso de incumplir con este derecho, la Superintendencia de Industria y Comercio puede imponer multas de hasta 2.000 salarios mínimos legales vigentes, previa investigación administrativa”, explica. Además, destaca que incluso los productos en promoción están sujetos al retracto, salvo excepciones como tiquetes aéreos comprados en tarifas promocionales.

Por su parte, Estefanía Aldana, asociada de Brigard Urrutia, enfatiza en la importancia de la claridad en la devolución del dinero. “El proveedor deberá devolver el monto pagado sin descuentos ni retenciones, y el reembolso no puede exceder los 30 días calendario desde que se ejerce el derecho al retracto. Este mecanismo asegura que los consumidores no se vean afectados económicamente al desistir de una compra”, señala. También, subraya que este derecho solo puede ejercerse en compras específicas, como aquellas realizadas por internet o sistemas de financiación.

En términos de regulación, Manuela Reyes, también asociada de Brigard Urrutia, dice que los productores y proveedores están obligados a cumplir con lo dispuesto en el Estatuto del Consumidor. “Las normas son de orden público, y los términos y condiciones deben ajustarse a lo que dicta la ley para proteger los derechos de los consumidores”, afirma.

Esto incluye proporcionar información veraz, transparente y precisa sobre los productos y servicios, así como garantizar que las promociones y ofertas cumplan con los requisitos legales. El ejercicio del derecho al retracto, aunque poderoso, requiere que los consumidores actúen de manera informada y dentro de los plazos establecidos, que son de cinco días hábiles contados a partir de la entrega del bien o la firma del contrato.

Las expertas coinciden en que tanto las empresas como los consumidores deben familiarizarse con esta norma para evitar conflictos y asegurar transacciones justas. Además, resaltan que las sanciones por incumplimiento buscan reforzar los principios de transparencia y legalidad, protegiendo los derechos a los compradores.