Opinión

Para mejorar en la bicicleta

03 de octubre de 2014
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• Hacer siempre la misma ruta, resulta muy fácil por cuestión de horario, pero se torna monótono y puede ocasionar un estancamiento. El cuerpo se acostumbrará al esfuerzo y no avanzará. Lo mejor es variar las rutas: mayor o menor distancia, que incluyan ascensos, plano, ida y regreso, circuitos, etc. Variar de grupos es una buena manera de conocer rutas. 

• No se recomienda intentar seguir al más rápido. Nuestro cuerpo necesita adaptarse poco a poco a los esfuerzos, no siempre puede salir a tratar de ganar. Hacer recorridos poco exigentes pero constantes hará que gane mucho fondo y es clave a largo plazo. 

• Entrenar solo los domingos es una falta de constancia que no resulta en buen rendimiento. El cuerpo necesita de esfuerzos continuos y repetidos a lo largo de la semana para ir mejorando y el rendimiento se afectará si bajamos la guardia. Los entrenamientos tienen como objetivo adaptar el organismo al esfuerzo físico. La actividad física implica constancia (dos a tres estímulos semanales para obtener crecimiento y optimización en la actividad que hayamos elegido) y cumplimiento para mantener y mejorar el estado físico.

• Conviene que la bicicleta se encuentre en perfectas condiciones. Se le debe hacer un mantenimiento preventivo dependiendo de la frecuencia con la que se utilice. No debe faltar un casco protector (que no sea prestado, ya que debe quedar correctamente ajustado) y siempre es bueno llevar líquido y comida, además del repuesto (en caso de pinchazo) y gafas protectoras para el sol, el viento y el polvo.

• Aunque el calentamiento pueda parecer aburrido, en realidad es muy importante ya que activa el sistema neuro muscular, aumenta la temperatura de los músculos y articulaciones, mejora la elasticidad de los tendones y ligamentos, e incrementa la fluidez de las articulaciones. También optimiza el metabolismo y asegura un mayor aporte de oxígeno y glucosa a los músculos. Además prepara al deportista psicológicamente para realizar un esfuerzo más intenso de lo normal.