El signo reproducía varios elementos de un signo de pasteles registrado
13 de febrero de 2018Contenido
La empresa GreenYard NV solicitó a la Dirección de Signos Distintivos en la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) el registro de la marca Pinguin (mixta), para distinguir productos en la clase 29 y30 de la Clasificación Internacional de Niza.
El Grupo Bimbo SAB y la empresa de helados Bonice Brands presentaron cada una su oposición ante el registro basadas en el literal a) del artículo 136 de la Decisión Andina 486 según la cual, no se pueden inscribir signos que se asemejen a otras marcas previamente registradas en el mismo segmento.
La clase 29 y 30 de la Clasificación de Niza cobija productos como frutas y verduras congeladas, carnes de ave y comidas congeladas compuestas principalmente de arroz y harina.
Bimbo apeló ante el parecido con su famoso ponqué, Pingüinos Marinela, y Bonice abogó por su tradicional barra congelada cuya insignia cuenta la imagen principal de esa ave.
GreenYard contestó los alegatos argumentando que ninguno de los tres pingüinos se parecen entre sí, por lo que no se generaba ningún riesgo de confusión en caso de que coexistieran. Además, las opositoras no podían pretender apoderarse de la representación de un animal genérico para toda una clase.
El despacho de la Dirección procedió a hacer el análisis comparativo de los íconos para deliberar quién tenía la razón. En el caso de Bonice, los expertos encontraron que si bien la solicitante coincide en el uso del ave, la marca vista en su totalidad, no genera ningún riesgo de confusión con el helado. Respecto a los ponquesitos Marinela, el despacho dijo que entre los nombres de las partes hay similitudes fonéticas y ortográficas que impedirían la coexistencia de los productos sin generar confusiones al consumidor.
A pesar de que los ponqués y la marca Pinguin no estaban incursas en la misma clasificación de Niza, la Dirección declaró que se encuentran dentro del mismo género de alimentos y podrían usar los mismos canales de comercio.
El jefe del despacho Julio Mario Bonilla Aldana declaró infundada la oposición de Bonice, concedió la oposición de Bimbo y no registró Pinguin de la empresa GreenYard. Finalmente se notificó a las tres empresas que aún existe un recurso de apelación al que pueden recurrir.
Álvaro Ramírez Bonilla, CEO de BR Latín American IP LLC, expresó que “a pesar de que el signo Pinguin se encuentra en la misma clase y comparte, en el ámbito ortográfico, algunas similitudes con otros signos previamente registrados, sus elementos visuales e ideológicos le dan la distintividad necesaria para ser registrado como marca sin que esto genere riesgo de confusión para los consumidores”.
Carlos Amaya, asociado de Amaya Propiedad Intelectual, dijo que “la marca Bonice fue declarada notoria respecto del elemento nominativo. La figura del pingüino es de uso común para las clases 29 y 30, por tal razón no la hallaron confundible con el signo solicitado”.