Desde 1978 el Fitb se convirtió en uno de los espacios de concentración artística más populares para Colombia
15 de noviembre de 2017Contenido
El Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá (Fitb) es un espectáculo bienal que reúne presentaciones y artistas de todo el planeta en alrededor de 800 puestas en escena con compañías nacionales e internacionales.
Desde 1978, año en que el festival empezó a ser promovido por la actriz y empresaria colombo-argentina Fanny Mickey, el Fitb se convirtió en uno de los espacios de concentración artística más populares para Colombia, con audiencias superiores a cuatro millones de espectadores, por lo que su marca fue catalogada como notoria.
Estas estadísticas fue una de las razones que motivó a la Dirección de Signos Distintivos de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) a otorgar el estatus de signo notorio a la marca del festival.
La decisión surgió a partir de la oposición presentada por la Corporación Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, propietaria del Fitb, cuando la Fundación Amigos del Teatro Mayor, solicitó al despacho la inscripción de la marca denominativa Festival Internacional de Teatro de Bogotá, para la clase 41 de Niza.
La corporación indicó a la Superindustria que el signo solicitado reproducía en su totalidad su marca registrada y que consideraba que de este modo debía negarse su inscripción para evitar que el público asociara o confundiera ambos nombres.
Juan Manuel Serrano, director de Signos Distintivos, revisó una serie de pruebas aportadas por el opositor del caso, en las que resaltaba la Ley 1686 de diciembre de 2013 por medio de la cual “se declara como patrimonio cultural de la Nación el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá y se “garantiza su preservación como el mayor espectáculo nacional de las artes escénicas”.
Las pruebas también incluían los ingresos operacionales y la publicidad utilizada en las pasadas ediciones del festival, elementos con lo que la SIC pudo evidenciar el nivel de reconocimiento del Festival Iberoamericano.
Tras estas consideraciones, Serrano decidió no solo declarar fundada la oposición presentada por la Corporación Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá y negar el signo Festival Internacional de Teatro de Bogotá, sino también reconocer la notoriedad del signo del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá.
En opinión de Carlos Amaya, socio de Amaya Propiedad Intelectual, “la coexistencia causaría una desorganización en la libertad de elección del consumidor y representaría un aprovechamiento comercial y publicitario en favor de un tercero diferente al empresario titular de la marca registrada”.
Juan Carlos Martínez, docente de propiedad industrial de la Universidad de la Sabana, resaltó que “la SIC ha decidido negar la marca Festival Internacional de Teatro de Bogotá pues se trata de un signo que resulta similarmente confundible con la marca notoria opositora, pudiendo desencadenar que el destinatario de servicios culturales crea que se trata de un mismo festival o que son organizados por el mismo empresario”.